La idea de que tenemos un alma gemela sigue estando fuertemente arraigada en el imaginario colectivo, así como la creencia de que nuestra felicidad depende, en gran medida, de encontrar a nuestra “otra mitad”, a esa persona que nos hará sentir completos. La película que analizaremos en esta ocasión trata, justamente, de la búsqueda de esa persona indicada dentro de la temática del romance condenado. En 500 Days of Summer (2009), dirigida por Marc Webb, Tom (Joseph Gordon-Levitt) conoce a Summer (Zoey Deschanel) e inmediatamente cree que es la mujer que había estado buscando. La relación que se da entre ellos expone la problemática de un amor unilateral, así como sus consecuencias, especialmente cuando una persona se aferra a otra a pesar de que el afecto no sea correspondido.


Tom es un arquitecto frustrado que trabaja como escritor en una empresa de tarjetas de felicitación. Él está convencido de que nunca será feliz si no encuentra a su alma gemela, afirmación que el narrador expresa desde el inicio de la película: “This is a story of boy meets girl. The boy, Tom Hansen of Margate, New Jersey, grew up believing that he’d never truly be happy until the day he met «the one.«” (Esta es una historia de chico conoce chica. El chico, Tom Hansen de Margate, Nueva Jersey, creció creyendo que nunca sería verdaderamente feliz hasta el día que conociera a la mujer indicada.) Su mundo cambia el día que conoce a Summer, la nueva asistente de su jefe. Summer, por su parte, es una mujer libre que no cree en el amor. “There’s no such thing as love, it’s fantasy…” (No existe el amor, es una fantasía.) El divorcio de sus padres la volvió pesimista en torno a las relaciones de pareja y prefiere tener solo amoríos casuales sin ataduras o etiquetas. La película explora el tema del romance frustrado a través de la relación de dos personas que tienen ideas prácticamente opuestas sobre el amor.


El mito del andrógino y la eterna búsqueda de nuestra “otra mitad”



El concepto de alma gemela tiene su origen en la filosofía platónica. En el diálogo del Banquete, se presenta un discurso hecho por Aristófanes que relata que antiguamente existía un ser conocido como “el andrógino” que tenía rasgos tanto femeninos como masculinos. El cuerpo del andrógino estaba compuesto por cuatro brazos, cuatro piernas, dos caras y tenía forma circular. Los seres andróginos desafiaron a los dioses y Zeus los castigó dividiéndolos en dos mitades, una femenina y una masculina. Estos cuerpos fraccionados no podían sobrevivir sin su complemento ya que la tristeza de la separación los llevaba, incluso, a la muerte. De este mito surge la noción de que los seres humanos solo son felices cuando encuentran su mitad perdida.


Como se mencionó arriba, Tom es un fiel creyente de este arquetipo, hecho que lo lleva a estar en una constante búsqueda del amor de su vida. Summer tiene convicciones muy distintas y es muy clara al respecto, inclusive antes de que su relación con Tom inicie.


Tom: What happens if you fall in love? (¿Qué pasa si te enamoras?)
Summer: Well, you don’t believe that, do you? (Bueno, tu no crees eso, ¿o sí?)
Tom: It’s love. It’s not Santa Claus. (Es amor. No es Santa Claus.)


Para Summer, todas las relaciones tienen fecha de caducidad; ella le explica a Tom que no quiere nada serio y él acepta, sin embargo, la ambigüedad de la relación es algo que a él le causa gran conflicto.


Tom: Look, we don’t have to put a label on it. That’s fine. I get it. But, you know, I just… I need some consistency. (Mira, no tenemos que ponerle una etiqueta. Está bien. Lo entiendo. Pero, sabes, yo solo… yo necesito algo de consistencia.)
Summer: I know. (Lo sé.)
Tom: I need to know that you’re not gonna wake up in the morning and feel differently. (Necesito saber que no te vas a despertar una mañana y te sentirás diferente al respecto.)
Summer: And I can’t give you that. Nobody can. (Y yo no puedo darte eso. Nadie puede.)

No obstante, Tom se aferra a la idea de que es el amor de su vida; se convence de que su felicidad depende de estar con ella y proyecta eso en Summer. Evidentemente, esa idealización genera que ella no cumpla la expectativa que él tiene.


Amor vs obsesión



Tom decide de manera unilateral que él y Summer son el uno para el otro y eso pone una presión enorme sobre ella y la relación. Cuando ella no cumple el ideal que él tiene, Tom se siente traicionado, pero no es la responsabilidad de la otra persona cumplir nuestras expectativas. Estas proyecciones resultan dañinas y pueden convertirse en una obsesión, como le ocurre a Tom.
Debido a que la película está narrada solo desde la perspectiva de Tom, únicamente vemos la versión de Summer que existe en su mente; Tom solo ve lo que quiere ver. Cabe resaltar que Tom la percibe, exclusivamente, bajo un lente idealizado; no la ve realmente como es. Él la concibe como una “manic pixie dream girl” a pesar de que ella difiere considerablemente del tropo. Aquí surge un cuestionamiento fundamental, ¿estaba Tom realmente enamorado de Summer o más bien de su idea de Summer?


Frecuentemente, una persona se obsesiona con alguien que no conoce bien, tal como el caso de Tom y Summer. Es, justamente, esa falta de conocimiento del otro lo que permite que la obsesión se desarrolle. Dada la poca información real que tiene Tom sobre Summer, su mente obsesiva crea una serie de proyecciones completamente infundadas sobre la vida, gustos y comportamientos de ella. Él interpreta cada acción que ella toma como una confirmación de lo que él siente.


Las obsesiones surgen para evadir alguna situación de gravedad o relevancia en nuestra vida. Tom se empecina con Summer para no enfocarse en su fracaso profesional; dirige todos sus pensamientos hacia ella para ignorar lo que verdaderamente le hace ruido. La prueba más contundente de esto es que, cuando finalmente acepta que ella no va a regresar con él, Tom logra escuchar a su voz interior que lo impulsa a cambiar su vida y retomar su carrera como arquitecto.


La obsesión de Tom se convierte en una condición conocida como limerencia, que ocurre cuando alguien desarrolla un deseo intenso por otra persona aun cuando no sea completamente correspondido. La persona limerente tiene dificultad para pensar en cualquier cosa que no sea el objeto de su deseo, llegando a un punto en el que afecta su vida social y laboral. En la película se aprecia como esto le ocurre a Tom: “I’m messed up. I am. You know, on the one hand, I want to forget her. On the other hand, I know that she’s the only person in the entire universe that will make me happy.” (Estoy hecho un desastre. Lo estoy. Sabes, por una parte quiero olvidarla. Por otra yo sé que ella es la única persona en todo el universo que me hará feliz.)


El término limerencia fue acuñado por la psicóloga Dorothy Tenov en la década de los 1970s tras conducir una serie de entrevistas en las que se percató que un porcentaje importante de los entrevistados mostraban expresiones muy intensas con respecto al amor y las relaciones de pareja. También notó que esta condición podía afectar a cualquier persona sin importar factores como edad, género, etnicidad o nivel socioeconómico.


Aquella persona que padece de limerencia vive en un estado de vacilación constante que oscila entre esperanza y fracaso, aguardando siempre a que se defina la relación, a que el otro confiese sus sentimientos. Es común que se dé esta situación cuando no ha habido un rechazo rotundo, pero tampoco ha habido una confirmación de amor. De acuerdo a la percepción de Tom, Summer lo mantiene, precisamente, en ese punto de incertidumbre. Ese estado de duda lo lleva a analizar cada palabra, comportamiento y actitud de Summer para encontrar una señal que corrobore que ella siente lo mismo que él. Recordemos, empero, que ella nunca mostró ambigüedad sobre lo que quería; ella fue completamente clara desde el principio estableciendo que no buscaba algo serio y que no creía en el amor.


El estado limerente suele ir acompañado de fantasías sobre el futuro, situación que se presenta en la obra cuando Tom va a la reunión en casa de Summer. De un lado de la pantalla se muestra la realidad, mientras que del otro vemos la expectativa de Tom. La limerencia también presenta algunas otras características que podemos identificar en Tom como: idealización del objeto de deseo, por ejemplo, decir que la persona es perfecta; fluctuaciones de humor dependiendo de si parece haber reciprocidad o no, y emociones exacerbadas. El verdadero problema surge cuando queda claramente establecido que la otra persona no siente lo mismo porque el limerente puede llegar a desarrollar cuadros de ansiedad y depresión.


Tom: You know what sucks? Realizing that everything you believe in is complete and utter bullshit. (¿Sabes lo que apesta? Darte cuenta de que todo lo que creías vale mierda.)

Summer: What do you mean? (¿A qué te refieres?)
Tom: Uh, you know. Destiny, and soul mates, and true love. And all that childhood fairytale nonsense. You were right. I should have listened to you. (Ah, ya sabes. El destino, y las almas gemelas, y el amor verdadero. Y todas las tonterías de los cuentos de hadas. Tenías razón. Debí hacerte caso.)

Es importante entender que la limerencia no es amor, aunque pueda parecerlo en la superficie; es una obsesión tóxica y egoísta en la que el bienestar de la otra persona no importa. El amor verdadero busca siempre lo mejor, es desinteresado y se basa en el respeto de los deseos y sentimientos del otro. El limerente no ama, solo busca alimentar su obsesión.


Trascendiendo la idea del alma gemela


500 Days of Summer hace una crítica interesante a los estereotipos que promueven las comedias románticas. Entre ellos destaca el chiché de que el chico bueno finalmente conquista a la chica siendo persistente e insistente, sin embargo, este modelo dista mucho de lo que debe ser una relación consensual basada en el respeto. El estereotipo del amor a primera vista es otro punto que reprocha. ¿Cómo se puede pensar que alguien es el amor de tu vida sin conocer realmente a la persona? Rachel, la hermana menor de Tom, lo resume perfectamente: “Just because she likes the same bizzaro crap you do doesn’t mean she’s your soul mate.” (Solo porque le gusta la misma mierda rara que a ti no significa que es tu alma gemela.) La obra también critica la actitud posesiva y egocéntrica que suele acompañar a las personas que se obsesionan como Tom. Es evidente que él nunca tomó en cuenta lo que Summer quería y que la relación estaba condenada al fracaso aún antes de iniciar.


Curiosamente, hubo muchas personas que no entendieron el mensaje de 500 Days of Summer, sintieron simpatía por Tom y tacharon a Summer de mala. Pero, a pesar de ser un romance condenado, la experiencia le deja algo valioso a Tom. Al inicio de la película él es un personaje conformista, sobre todo en cuanto a su trabajo. Pone sus aspiraciones en segundo plano y deja que la falta de motivación se apodere de él. La relación con Summer lo impulsa a buscar algo más, a retomar su sueño de ser arquitecto y dejar su trabajo mediocre. Esta historia no trata de un encuentro de amor, sino de un encuentro que lleva a un aprendizaje. Aunque Summer no resulta ser su alma gemela, conocerla lo ayuda a cambiar su vida.


Sigue habiendo mucha energía puesta en la búsqueda de nuestra “alma gemela”, como si realmente existiera ese ser mítico que, al momento de encontrarlo, resultara ser todo lo que siempre habíamos querido y necesitado. Pero 500 Days of Summer nos enseña que no cada persona con la que nos involucramos románticamente tiene que ser nuestra media naranja, sino que cada persona con la que decidimos compartir nuestro corazón nos ofrece una oportunidad para amar y, aún más importante, una oportunidad para aprender. Cada experiencia es única y nos aporta algo. Al final de cuentas, cada uno de nosotros es una colección de experiencias que han forjado la persona que somos. ¿Cómo podemos saber que alguien es nuestra otra mitad si no hemos tenido experiencias previas para saber quién definitivamente no lo es? Es igual de importante saber lo que queremos como lo que no queremos, tanto en una pareja como en nuestra vida. No dejemos que la búsqueda del amor ideal determine nuestra felicidad.


Referencias



Ferrarello, S. (17 de junio de 2023). Is It Love or Obsession? How to cope with obsessive thoughts in a relationship. Psychology Today. Recuperado de: https://www.psychologytoday.com/intl/blog/lying-on-the-philosophers-couch/202304/am-i-obsessed-or-in-love

Meyers, A. (2 de octubre de 2018). 500 Days of Summer – the only love story you ever need to see. Recuperado de: https://www.youtube.com/watch?v=KVbaYT_We2o.

Raposo Villar, N. (2023). El mito del andrógino y de la “otra mitad” : orígenes y tradición estética. Bellaterra: Universitat Autònoma de Barcelona. Recuperado de: https://ddd.uab.cat/record/280762

Screened. (28 de marzo de 2018). 500 Days of Summer – What’s The Point of a Doomed Romance? (Part 1). Recuperado de: https://www.youtube.com/watch?v=gkBxcwbqflw

The Attachment Project. (2020). What Limerence Is and How to Overcome It. Recuperado de: https://www.attachmentproject.com/love/limerence/

The Take (12 de diciembre de 2020). Why 500 Days of Summer is So Misunderstood. Recuperado de: https://www.youtube.com/watch?v=qMG_M0PFNAg

Para saber más

Manic Pixie Dream Girl: amor y fantasía en el cine https://blog.rebelionantigua.com/maniac-pixie-dream-girl-amor-y-fantasia-en-el-cine/

¿Cuál es el punto de un romance condenado? : Lost in Translation https://blog.rebelionantigua.com/cual-es-el-punto-de-un-romance-condenado-lost-in-translation/

¿Cuál es el punto de un romance condenado?: Her https://blog.rebelionantigua.com/cual-es-el-punto-de-un-romance-condenado-her/

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