
«Antes de embarcarte en un viaje de venganza, cava dos tumbas»
Confucio
Revenge is never a straight line. It’s a forest, And like a forest it’s easy to lose your way… To get lost… To forget where you came in.” (La venganza nunca es la línea recta. Es un bosque, y, al igual que un bosque, es fácil perder tu camino… perderte… olvidarte de dónde viniste)
Hattori Hanzo (Played by Shin’ichi Chiba in Kill Bill: Vol. 1)
Considerada una de las novelas más importantes de la historia El Conde de Montecristo retrata con increíble detalle la vida de Edmundo Dantes quien unos días después de haber sido nombrado capitán de un barco y haberse comprometido con su novia Mercedes, en el día de su boda es arrestado por la sospecha de conspirar contra el rey y ser agente bonapartista. Todo bajo la falsa acusación de una carta hecha por Danglars, Fernando y Caderousse quienes por envidia deciden conspirar en su contra. Edmundo, siendo un personaje de corta edad y nula malicia al principio considera el arresto un error y al llegar a declarar ante Villefort entrega una carta que el anterior capitán del barco le había dado para el padre de Villefort quien si era un político bonapartista y del cuál Villefort protege acusando falsamente a Edmundo y lo condena al Castillo de If en el cual pasaría más de 15 años encerrado.
Han sido numerosas producciones que se han hecho de esta novela. Hasta la fecha ninguna de ellas ha logrado captar la larga y compleja trama del libro del cual hay incluso versiones resumidas. Además de adaptaciones se han hecho secuelas, obras de teatro, adaptaciones y otras producciones inspiradas en la historia de Edmundo Dantes. Carlos Fuentes incluso llego a escribir una obra basada en el hipotético caso en el cual el abate Faria hubiera sido el que saliera de la prisión y no Edmundo. En Carolina Grau, el famoso escritor mexicano hace un capítulo ficticio en el que el Abate Faria va tras una mujer dejada en el pasado una vez que escapa del Castillo de If. En una entrevista menciona al Conde de Montecristo como una de las mejores novelas escritas debido a que el personaje principal realiza el sueño de muchos: vengarse totalmente de sus enemigos, algo que en palabras del autor es sumamente difícil para el afectado.

Las caras de la venganza
La novela de Dumas -dice Carlos Fuentes- es extremadamente atractiva ya que todos hemos querido tener el coraje que tuvo Edmundo Dantes para dar caza a aquellos que lo enviaron a vivir un infierno por 15 años y hacerlos pagar por sus actos. Por supuesto, la mayoría de las personas a quienes reciben un mal por parte de otros saben que la venganza implica consecuencias. Desde los más civilizados que piensan en «no hacerse justicia por su propia mano» hasta otros que saben pueden desatar una espiral de venganzas sin fin. Eso es lo que sucede en las bandas cuando alguno de sus miembros sufre una injuria de parte del contrario, es lo que vimos que sucede cuando La Novia de Kill Bill busca acabar con aquellos que casi la mandan a la tumba. Es lo que los narcotraficantes sueltan cada que acribillan a uno de sus rivales.
¿Es entonces adecuado vengarse? El Dr. Isaiah Hankel considera que existen formas inteligentes de vengarze de alguien, sin embargo, asegura que hacerlos pagar no generará algún tipo de satisfacción positiva. El mismo Conde de Montecristo se excusa de la venganza al admitir que el «sólo es un instrumento de Dios» al momento de asumir la responsabilidad por sus actos, considerados divinos. Hankel cree que es posible vengarnos de muchas formas que no sean una respuesta directa contra nuestros agresores. Un tercero puede ser parte también de la venganza de forma positiva o negativa, es decir, beneficiendo o destruyendo parte que quien es. En la novela, personajes como Bertuccio y Haydée mejoran su suerte gracias a Edmundo a la vez que la familia Morcef es recompensada por haberse preocupado de la familia Dantés cuando esta cayó en desgracia.
Y es que vengarse puede ser un proceso sumamente largo y desgastante. El tiempo total que le toma a Montecristo lograr su venganza desde el momento en el que es encerrado en el Castillo de If hasta que ve a su último enemigo morir de hambre es de casi veinte años. En una de las tantas películas que se hicieron sobre la novela, el asistente de más confianza de Edmundo le dice «Tienes todo el dinero del mundo, contrata un par de pistoleros y ¡bum! se acaban todos» a lo que Edmundo responde: «No, la muerte es algo demasiado bueno para ellos, deben sufrir lo que yo sufrí”. Y es que -como dice Hankel- la venganza es algo que a veces es necesario.
En el libro Beyond Revenge: The Evolution of the Forgiveness Instinct el autor Michael McCullough nos dice que la venganza tiene un fin evolucionario. Al vengarnos hacemos que las ganancias del otro sean menos rentables además de prevenir que la misma persona vuelva a causarte más daño en el futuro. La venganza también hace ver a los que te rodean que eres capaz de enfrentarte a aquellos que te hacen daño. La clave es hacerlo con inteligencia.

La inteligencia social de Montecristo
Este es el parte central y quizás mejor elucubrada por un escritor como Dumas, el detalle con el que Montecristo va logrando cada uno de sus objetivos es magistral. En la novela se explica algo que ninguna película ha captado lo suficientemente bien (quizás un poco la miniserie francesa de 1997) y es la forma en la que el Conde se introduce en la clase más alta de Francia. Gracias a la ayuda de Luigi Vampa, el secuestrador de Alberto de Morcef, Montecristo logra ganarse la confianza del hijo de Mercedes y la simpatía de su padre el conde de Mondego.
A diferencia de las películas (sobretodo en la versión americana, quizás la peor de todas en donde Montecristo se presenta en público llegando en un globo) el conde logra captar la atención de forma sútil, a largo plazo y cubriendo cualquier pista que pudiera revelar la verdad de sus planes (hay un capítulo en el que sospechan de él y se viste de abate para cubrir sus huellas y resarcir dudas). Si bien muchos críticos de la novela consideran que el personaje de el Conde de Montecristo se vuelve casi infalible en sus actos una vez que escapa. Lo que podría justificar esta actitud del personaje es el personaje que funciona como el arquetipo de el Maestro: el abate Faria.
Quien lleva el personaje de Edmundo a la mente maestra de Montecristo es debido al tiempo pasado con el abate Faria quien no sólo le da el legado de su inteligencia sino también de su fortuna. Montecristo también lleva parte de su venganza a vivir la vida que el Abate hubiera querido, pues su único consuelo al final de su vida fue haberle heredado su inteligencia a Edmundo. Al final del libro, Edmundo va a visitar la antigua celda de su maestro y encuentra el único documento escrito por el abate que conserva como un tesoro y que al final le redime de todos sus actos.
En Wikipedia es posible encontrar un diagrama de la relación que cada personaje tuvo con otro. Tan complejo mapa de relaciones sociales es otra prueba de la genialidad de la novela.


Una empresa costosa y arriesgada
La venganza es retratada en obras posteriores a Montecristo como algo que debe estar plenamente justificado. En series de televisión como Revenge, la protagonista está motivada por idea de limpiar el nombre de su padre que fue acusado de haber realizado un atentado terrorista cuando en realidad era inocente. La moralidad americana convierte a la heroína en un ser que merece destruir a todos y cada uno de los que le hicieron daño a su familia aunque al final termina destruyendo la vida de casi todos.
En las películas que se hicieron a principios del siglo XX se justificó la venganza de Montecristo poniendo especial atención a Mercedes y el amor que Dantés sentía por ella. Casi todas las películas de la novela terminan con Edmundo Dantés y el Conde de Montecristo juntos (exceptuando la versión mexicana que respeta fielmente la novela y termina con Haydée) y una versión hecha en los 70’s en la que Mercedes se marcha con su hijo.
La primera recomendación del Dr. Hankel es que una venganza inteligente debe permanecer supremamente racional. Al ser una empresa motivada por la emoción y el coraje, la venganza requiere de una mente fría y calculadora. Característica que personajes como la novia de Kill Bill y Montecristo mantienen a lo largo de su aventura (con excepción de la llegada de la hija de la novia y el capítulo en dónde Mercedes va a rogarle a Edmundo que no mate a su hijo). La recomendación es que se vea como la pérdida de un negocio: alguien te ha quitado parte de tu patrimonio y ahora te toca mover una pieza de ajedrez en el que previenes que tome más de ti en el futuro.
«Así como es necesaria la presión para hacer estallar la pólvora, así el infortunio es necesario también para descubrir ciertas minas misteriosas ocultas en la inteligencia humana»
Abate Faria

Desdicha y fortuna
Otro punto esencial en la novela de Dumas y que vemos en otras obras inspiradas en ella es la fuerza que brinda el infortunio al desdichado. Edmundo Dantés jamás habría logrado ser un conde de extraordinaria inteligencia y astucia sino hubiera sido encerrado por más de 15 años de forma injusta. Lo mismo para V en la película de V de Venganza y Emily Thorne en la serie de Revenge. Aquí se aplica el principio estoico del que habla Marco Aurelio «Acuérdate en adelante, cada vez que algo te contriste, de recurrir a esta máxima: que la adversidad no es una desgracia, antes bien, el sufrirla con grandeza de ánimo es una dicha.».
El Dr. Hankel recomienda que la venganza sea hecha a través de los actos y no las palabras. Toda persona que se embarca en esta empresa evita hablar del tema sin embargo está presente en cada uno de sus actos. También son personas que evitan desperdiciar tiempo y se enfocan en que su máquina humana se mantenga lo suficientemente sana para evitar distracciones en su objetivo.

Acabar con el contraataque
Otra razón por la que el Conde de Montecristo toma tanto tiempo en planear su venganza es que no espera que sus enemigos tengan la oportunidad de regresarle el golpe. A diferencia de una pelea entre mafías, el personaje de Dumas piensa atacar con la suficiente fuerza para que sus enemigos sean aplastados por completo. Es por eso que cada uno de sus enemigos termina suicidándose, loco o encarcelado para siempre. Siguiendo un principio de Sun Tzu: «El combatiente hábil impone su voluntad sobre el enemigo, pero no permite que la voluntad del enemigo le sea impuesta». La mejor venganza es aquella en la que dejamos totalmente acabado al contrario y su posibilidad de contraataque son nulas.

La venganza en la vida moderna
Sunny came home with a list of names
Shawn Colvin – Sunny Came Home
She didn’t believe in transcendence
And it’s time for a few small repairs, she said
Sunny came home with a vengeance
Hoy en día vivimos en una moral judeo-cristiana que impide que la gente busque vengarse de sus enemigos. Al sufrir un ataque por parte de otro, el cristiano promedio dirá «Ya se le hará justicia divina» como si una gran bota venida del cielo fuera a aplastar al contrario por haber cometido el mal. Otros vuelcan su energía en hacer que el Estado les haga justicia mediante las leyes instituidas. Sin embargo ninguna proporciona la fuerza necesaria para que el vengador se vuelva más fuerte gracias a la injuria. Muchos piensan en su integridad física o mental como factor determinante para no hacer nada por devolver el golpe. Si bien muchas de estas razones son válidas, la venganza no tiene que ser violenta o directa contra el oponente. Triunfar en el área en el que fue dañado es también una forma de vengarse del enemigo. Ya sea consiguiendo riqueza, prestigio, amor o éxito profesional o algo similar en lo que haya hecho el daño.
Ante todo, lo más importante de un plan vengativo es el tiempo y la paciencia. Ya lo dice Montecristo al final del libro: «¡Confiar y esperar!»
Referencias
Isaiah Hankel
10 Ways Intelligent People Get Revenge
El Conde de Montecristo
Alejandro Dumas
El Arte de la Guerra
Sun Tzu